Reportaje/ Minigolpe de estado en Cuernavaca

Reportaje 

Minigolpe de estado en Cuernavaca 

*Cabildo con mayoría priísta "'Destituyen" a Cuauhtémoc Blanco

Lino Calderón / enviado

Cuernavaca, Morelos.-Violentando las leyes estatales y locales el G9 integrado por regidores opositores "destituyó" al alcalde Cuauhtémoc Blanco, y puso en su lugar al regidor de Movimiento Ciudadano, Jorge Dada Lemus; mientras que en la Secretaría del ayuntamiento puso a la concejal Gretel Streber, ante la ausencia de 6 regidores, el edil y la síndico, para que se reanudara la primera sesión en receso.

Para hacerlo, dijeron basarse en el artículo 115 constitucional, y el 41 del reglamento interno del cabildo, con la finalidad de nombrar a sus propuestas para el gabinete.

Al consultar a una fuente cercana de Cuauhtémoc Blanco, se dio a conocer que contra dicho acto se solicitará la nulidad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo, pues la fuente añadió que es ilegal.

La accidentada primera sesión del cabildo iniciada el 1 primero de enero sigue dando de qué hablar, después de que ayer, luego de decretarse un receso alrededor de la una de la madrugada, se citó a una reunión para las 15:00 horas.

Sin embargo, las instalaciones de la comuna se encontraban bloqueadas por vecinos de 13 colonias que se encontraban sin agua, y las 16:00 horas cuando se retiraron del lugar.

Luego, los regidores del G9 fueron llegando uno a uno y fue hasta las 16:45 horas, cuando ya se tenía los 9 que representan el 50 % más uno de los integrantes del cuerpo edilicio y sólo esperaban el arribo de la Síndico Denisse Arizmendi.

Ni el alcalde, ni la Síndico llegaron, por lo que de acuerdo con el artículo 40 del Reglamento de Cabildos, la sesión tenía que diferirse, y ser convocada en cinco días, al entrar en el supuesto de la ausencia del alcalde y que no llegó la Síndico.

Sin embargo, los del G9, señalaron que harían la sesión, en donde nombrarían a los titulares de las secretarías.

Incidente

La sesión del viernes se suspendió  por considerar que había personas armadas en el lugar. El alcalde ciudadano confirmó que por amenazas e intimidaciones se tuvo que suspender la sesión de Cabildo; asegura que nada lo detendrá de trabajar por los ciudadanos. Aseguró que hay un complot de grupos priístas representados en el cabildo y que buscan su destitución para poner alguien a quien manipular".

"No me voy a bajar del barco, como se los prometí yo voy a trabajar por los ciudadanos" aseguró el Presidente Municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, en conferencia de prensa, en la que confirmó que por amenazas e intimidaciones de gente armada que se infiltró en la sesión del Cabildo, se tuvo que suspender dicha sesión donde se tomarían los acuerdos relevantes del inicio de la administración que encabeza.

"No quieren que gobierne y no lo voy a permitir, por eso les he pedido a los integrantes del Cabildo que hay que trabajar en unidad si realmente queremos un cambio", dijo el alcalde ciudadano. Blanco Bravo ante medios de comunicación comentó que él lo único que quiere es trabajar y mejorar Cuernavaca, "Cuando yo salga a la calle no quiero que me griten que soy ratero", abundó.

Cuauhtémoc

En este sentido enfatizó que en Cuernavaca se está trabajando todos los días, otorgando los servicios municipales que la ciudadanía necesita y en el tema de seguridad se está operando con un mando coordinado. "Los ciudadanos me pidieron que se trabaje con honestidad, me duele que Cuernavaca esté en crisis. Tengo la confianza de los ciudadanos y por ellos voy a trabajar con honestidad porque así me lo pidieron".

De acuerdo con el artículo 38 del reglamento interno del gobierno municipal, al observarse pocas garantías de seguridad para continuar con la sesión, esta tuvo que ser suspendida.

Posteriormente, Cuauhtémoc Blanco, platicó con representantes de los medios de comunicación a quienes explicó que el Cabildo es un órgano mediante el cual se debe deliberar, discutir y acordar diversos temas relacionados con el trabajo a favor de Cuernavaca, y no para imponer por la fuerza. Por lo anterior lamentó que gente de Manuel Martínez Garrigós y el propio Erick Yair Salgado, trataran de boicotear este espacio que se debe a los ciudadanos, dejando en claro que en este gobierno no habrá impunidad.

Los antecedentes 

Apenas el sábado pasado el presidente municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, fracasó otra vez en su intento de consensuar con los regidores su propuesta de nombramientos, y ante la falta de acuerdos abandonó la sesión de Cabildo.

Hace ocho días los regidores acudieron a la primera asamblea pero ante los desacuerdos se declaró un receso. Esta tarde se reanudó la sesión pero otra vez el equipo del edil no alcanzó los votos necesarios y se generó una controversia.

En esa confusión el edil pidió declarar un receso de 15 minutos para retomar los trabajos luego de que sus colaboradores lo alertaron de una posible amenaza por parte del ex alcalde priista, Manuel Martínez Garrigós. Los regidores rechazaron su propuesta y entonces abandonó el salón de Cabildos, en cuyo interior continuaban los regidores con las luces apagadas.

Minutos después convocó a conferencia de prensa en una sala alterna donde se encontraban su escolta de militares, pero cuando los reporteros ingresaron los soldados se retiraron del lugar.

Luego declaró que un grupo de hombres armados se encontraban dentro del palacio municipal. "Estoy un poco nervioso por la situación que estoy viviendo, claro que tengo miedo, pero aquí estoy dando la cara por la gente que votó por mi". Cuauhtémoc dijo que hay intereses de por medio porque ya habían llegado a un acuerdo para votar sus nombramientos, pero en la sesión se retractaron. "No me dejan trabajar. tengo miedo de que lleguen al Ayuntamiento y me metan un golpe de Estado", dijo en tono similar al momento en que el Mando Único tomó el control de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Cuernavaca.

Con respecto a las supuestas amenazas adelantó que analizará si acude a las instancias correspondientes para proceder legalmente en contra de Martínez Garrigós.

Por otra parte precisó que no está en contra del Mando Único siempre y cuando se trabaje en coordinación con la Policía Municipal, pero el regidor y presidente del PSD, Eduardo Bordonave corrigió que el Mando Único se convirtió en un mando coordinado en la capital del estado.

La fractura de la sesión ocurrió cuando la regidora del PSD, Amelia Fernández afin de Martínez Garrigós, se enfrascó en una discusión con el edil porque según Blanco Bravo la regidora había aceptado votar los nombramientos en una reunión previa. "Ahí están sus huellas, ahí esta su firma. Como se lo dije allá arriba: por las buenas soy buena persona pero por las malas me va a conocer", le dijo el edil.

Fernández cuestionó si se trataba de una amenaza y pidió que se asentara en el acta de Cabildo la advertencia del exfutbolista.

Antes de abandonar la sesión Blanco sometió a consideración los nombres de aquellos que ocuparían las Secretarías General, de Desarrollo Sustentable, de Obras Públicas, el Tesorero y el Contralor municipal.

Pero un grupo de regidores que integran el llamado G9, surgidos del PRI, PRD, dos del PSD, del Partido Humanista, Movimiento Ciudadano y del Verde Ecologistas, opositores al edil, apoyaron una contrapropuesta que incluye a militantes perredistas y priístas para conformar el gabinete municipal.

Teresa Pardiña, del PRD, promotora de la contrapropuesta consideró a la priista Rocío Carrillo y la perredista Manuel Sánchez en los nombramientos, aunque la primera fue representante del PRI ante el Consejo Municipal Electoral y desde ahí impugnó por todos los medios el triunfo electoral de Cuauhtemoc Blanco. Pardiña justificó su propuesta al decir que Cuauhtémoc Blanco no aplicó la equidad de género en los nombramientos.

Los regidores del G9 solicitaron someter a votación su propuesta y también Cuauhtémoc Blanco pidió votar la suya, pero ante la faltas de consensos la sesión fue suspendida de nuevo.