"Cambio climático convierte a la
tierra en un desierto": Papa Francisco
*El Papa pidió a los gobiernos que honren los acuerdos contemplados en el pacto de París
Ciudad del Vaticano.- El Papa Francisco instó el viernes a los gobiernos a cumplir sus compromisos para frenar el cambio climático, advirtiendo que la continuidad del desarrollo insostenible y el creciente consumismo amenaza con convertir la Tierra en una enorme pila de "escombros, desiertos y basura".
El pontífice argentino realizó el llamado en una conferencia en el Vaticano para conmemorar el tercer aniversario de su histórica encíclica medioambiental "Laudato Si" ("Alabado seas"). El documento, que buscaba impulsar la acción en la Conferencia del Clima de París de 2015, pedía un cambio de paradigma en la relación de la humanidad con la Madre Naturaleza.
En sus declaraciones, el papa pidió a los gobiernos que honren los acuerdos contemplados en el pacto de París, y agregó que instituciones como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial tienen un papel importante para alentar reformas que promuevan el desarrollo sustentable.
"Hay un peligro real de que a las generaciones futuras les dejemos solo escombros, desiertos y basura", advirtió.
Más de 400 delegados asistieron a la conferencia "Salvando nuestra casa común y el futuro de la vida en la tierra", organizada con motivo del tercer aniversario de "Laudato Si", la carta encíclica sobre el cuidado de la naturaleza escrita por el pontífice argentino.
El Vaticano será sede de una cumbre mundial sobre liderazgo climático
En su mensaje ante ellos, pronunciado en italiano, el líder católico aseguró que según las valoraciones de la comunidad científica, el ritmo de consumo, desperdicio y de alteración del ambiente ha siempre superado las posibilidades del planeta.
Así, siguió, el estilo de vida actual se ha vuelto insostenible y puede terminar solamente en catástrofes, como de hecho está ocurriendo en diversas regiones.
Deseo que esta preocupación por el estado de nuestra casa común se traduzca en una acción orgánica y concertada de ecología integral. La atenuación de los efectos del actual desequilibrio depende de lo que hacemos ahora", indicó.
Aseguró que la cumbre de las Naciones Unidas COP24 sobre el clima, programada para diciembre próximo en Katowice (Polonia), puede ser clave para avanzar en la puesta en práctica del Acuerdo de París de 2015, suscrito para evitar que aumente la temperatura del planeta.
Todos sabemos que mucho debe ser realizado para la puesta en práctica de aquel acuerdo. Todos los gobiernos deberían esforzarse por honrar los compromisos asumidos en París para evitar las peores consecuencias de la crisis climática", insistió, sin hacer referencia a la voluntad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de abandonar ese acuerdo.
La reducción de los gases de efecto invernadero requiere honestidad, valentía y responsabilidad, sobre todo de parte de los países más poderosos y contaminantes. No podemos permitirnos perder tiempo en este proceso", apuntó.
Reino Unido supera los 30 grados por primera vez en 5 años
Más adelante, sostuvo que la crisis ecológica mundial no depende sólo de los Estados sino que involucra a todos: autoridades locales, grupos de la sociedad civil, instituciones económicas y religiosas, las cuales pueden favorecer la cultura y la praxis ecológica integral.
Afirmó que no puede existir una solución genuina y duradera al desafío de la crisis ecológica y de los cambios climáticos sin una respuesta concertada y colectiva, sin una responsabilidad compartida, sin dar prioridad a la solidaridad y al servicio.
Señaló que también las instituciones financieras tienen un importante rol para jugar, como parte del problema y de la solución; por eso consideró necesario un cambio en el paradigma financiero con el fin de promover el desarrollo humano integral.
Llamó a las organizaciones internacionales, como por ejemplo el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, a favorecer reformas eficaces para un desarrollo más inclusivo y sostenible.
La esperanza es que las finanzas vuelvan a ser un instrumento finalizado a la mejor producción de riqueza y de desarrollo, así como al cuidado del ambiente", siguió.
Todas estas acciones presuponen una transformación a un nivel profundo, es decir un cambio en los corazones, un cambio en las conciencias. Hay que estimular y sostener la conversión ecológica. En esto, las religiones y las iglesias cristianas tienen un rol clave que jugar", ponderó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario