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jueves, 25 de julio de 2019

Facturas Falsas, Inexistentes a Partir de Agosto

Por Rebeca Marin

Facturas Falsas Inexistentes a Partir de Agosto

Luego que el presidente, Andrés Manuel López Obrador ha señalado varias veces que se castigará hasta con cárcel a aquellos contribuyentes      que hayan optado por comprar facturas falsas desde el año pasado, tendrán tiempo para ponerse al corriente, ya el Sistema de Administración Tributaria (SAT) les hará llegar en los próximos una invitación, luego una notificación y en caso de hacer caso omiso, les llegara una multa o una orden de aprehensión.

En agosto, el SAT empezará a perseguir a las Empresas que Deducen Operaciones Simuladas (EDOS). Una factura falsa es igual a cualquier Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI). Es válida porque cuenta con los elementos formales y autorizados. El contenido de la factura falsa se presume verdadero y logra tener consecuencias fiscales, pero cuando el fisco la revisa detecta que ampara operaciones simuladas o inexistentes.

Actualmente, el SAT ya empezó a mandar correos a las empresas que detectó que compraron este tipo de facturas. Cuando la empresa la compró por error, el SAT quiere que vayan a sus oficinas a buscar ayuda para evitar problemas en el futuro. Las empresas que hayan recibido estos correos pero que no se acerquen al SAT antes de agosto, recibirán las consecuencias.

El SAT empezará en agosto a enviar notificaciones en el buzón tributario a las empresas que no se acercaron a tiempo. Hay que recordar que recientemente se aceptó una modificación por la cual la compra y venta de facturas falsas pueden castigarse con tres a seis años de cárcel. Hasta ahora, el SAT ha identifico a más de 8 mil empresas que venden facturas.

Por lo que para los contribuyentes es muy importante estar muy atento a la comunicación que llegue a tu correo de parte del SAT, porque algunas veces los buscan para darles explicaciones sobre ciertas operaciones o bien sobre ciertas facturas.

Para proporcionar la dimensión del problema, el SAT informó que, desde 2014 y hasta la fecha, ha detectado a más de 8 mil contribuyentes que facturan operaciones simuladas, y un total de más de 8 millones de facturas falsas equivalentes a 1.6 billones de pesos, los cuales representan en términos de evasión fiscal más o menos 354 mil millones de pesos.

El SAT ya cuenta con la tecnología para identificar las operaciones ilegales, especialmente aquellas que se realizan para comprobar gastos inexistentes. Por ese motivo, hay tener mucho cuidado y si reciben una factura falsa sin saberlo, pues puedes ser sujeto de sanciones.

Hay tener en cuenta, que las facturas falsas, no llevan un sello que permita distinguir las falsas de las verdaderas, pero si hay una serie de indicios que permiten sospechar sobre la autenticidad de una factura.

En algunos casos es muy fácil comprobar que una factura es falsa y ocurre cuando el servicio que aparece en la factura no se ha prestado. Por ejemplo, si alguien hace una factura por reformar una casa y luego no hay ninguna reforma, el fraude es evidente.

El importe de la factura es desproporcionado: Uno de los objetivos más habituales de las facturas falsas es inflar los precios. Por eso una cantidad que parezca exagerada para lo que suele pagarse por ese producto o servicio es una señal de alarma.

No hay documentos que acrediten la operación: Ni contratos, ni documentos de entrega ni albaranes, solo la factura, aparecen conceptos muy genéricos que no dejan claro cuál es el servicio que se proporciona.

Facturas que se repiten en el tiempo: Si el concepto es sospechoso y se repite habitualmente puede encubrir algún tipo de anormalidad. Por ejemplo, varias facturas por pintar un local, como si se pintase cada semana.

Y para evitar problemas en la emisión de facturas es conveniente guardar cualquier documento que pruebe el vínculo entre la factura y la entrega de bienes o prestación de servicios. Por ejemplo: orden de compra, los documentos de transporte y la recepción del pago.

Y es que el SAT informó que, en los primeros tres meses del año, identificó en las diferentes aduanas alrededor del país un total de 190.4 millones de pesos en comprobantes fiscales falsos.

 

Dichas facturas alteradas y apócrifas, así como proveedores no localizados o inexistentes amparaban la compraventa de mercancía a la importación en las 49 aduanas del país. La cifra de este año es mayor a los 25.1 millones de pesos que se identificaron en el mismo periodo del año pasado, divulgó en su Informe Tributario y de Gestión.

 

Lo anterior significó que el órgano recaudador, a cargo de Margarita Ríos-Farjat, identificara un monto mayor en 658% en términos reales por facturas falsas que en el mismo periodo del año pasado. Sin embargo, el SAT no informó de cuántas personas se identificaron junto con estos comprobantes fiscales apócrifos.

 

Una factura se considera falsa porque, si bien cuenta con los elementos formales y autorizados por el SAT, ampara operaciones que no se llevaron a cabo.

Para lograr la identificación de este delito, el SAT se apoyó en el Plan Estratégico Aduanero Bilateral México-Estados Unidos, el cual entró en vigor en el 2014. Dicho plan impulsa una relación aduanera más amplia entre los dos países para combatir los fraudes fiscales y delitos que puedan ocurrir en las aduanas en la frontera con el país vecino del norte.

 

De acuerdo con lo acordado por las dos naciones, se establecieron cuatro pilares para combatir de manera eficiente y adecuada los delitos en las operaciones de comercio exterior: la competitividad; la seguridad y la aplicación de las leyes aduaneras; el fortalecimiento de las capacidades, así como el trabajo en conjunto con el sector privado.

 

"Este plan permite que ambos países puedan investigar las aduanas seleccionadas del otro país para agilizar los procedimientos aduaneros y vigilar, de mejor manera, las operaciones de comercio exterior", informó la autoridad fiscal. 


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