Nancy Grajeda
En nuestro país hay más pobreza, las familias mexicanas se truenan los dedos porque no saben cómo terminarán la semana ya que se come todos los días, bueno, al menos así debería ser por salud, pero muchos mexicanos solo comen una vez al día si bien les va por la situación de pobreza y marginación que padecen.
Ante este panorama tan desolador, la esperanza en que las cosas cambien para bien, que se haga justicia a las clases trabajadoras, que haya empleo para todos y que los servicios básicos en las colonias y comunidades se construyan se está perdiendo.
Por muchos años los mexicanos vivieron esperanzados en que el partido en turno del poder el PRI rectificaría, por eso se votaba por él cada sexenio, pero no fue así y el desencanto vino con la elección de Vicente Fox del Partido Acción Nacional, quien al poco tiempo defraudó la confianza que los mexicanos depositaron en él, no hubo ningún cambio sino más pobreza.
Siguió Felipe Calderón quien vino a rematar la poca confianza que aún se tenía en ese partido, por lo que los mexicanos voltearon de nuevo a ver con Peña Nieto la esperanza de un cambio.
Decepcionados de los anteriores, llegó aquel denominado "el mesías", porque con su lenguaje soez insultaba a todo lo que oliera a institución establecida y a la corrupción de sexenios anteriores y personajes de la política (que muy pronto pasaron a formar parte de sus filas porque fueron ungidos por su perdón), por la pobreza en el país, prometió que si él llegaba a ocupar la silla presidencial las cosas cambiarían, que México se volvería uno paraíso terrenal porque llevaría la justicia tan anhelada a las clases más desprotegidas.
Pero nuevamente los mexicanos se equivocaron y de la peor manera, ya que se le dio poder a una persona que ahora está tejiendo una dictadura con su mandato, donde el grupo de diputados, quienes deberían ser el contrapeso para que el poder no se desvíe y no se enferme solo se dedican a ser levanta dedos para aplaudir las decisiones de Andrés Manuel López Obrador, y a pesar de que en el país se está recrudeciendo la pobreza y los servicios qué que tanto costaron a los mexicanos obtenerlos como el de la salud y la educación, se están empobreciendo también junto con las familias mexicanas.
En los últimos meses han llegado a Antorcha muchos mexicanos para denunciar que algún familiar se debate entre la vida y la muerte por la falta de atención adecuada y medicinas que ya no existen en el Seguro Social para atender enfermedades como el cáncer, o la total falta de atención médica porque se desapareció al Seguro Popular.
Se ha dejado en el desamparo a los más pobres con la promesa de que con tarjetitas limosneras que ni les llegan a todos se van a poder pagar todo lo que necesitan para vivir, y eso es imposible.
Estamos viviendo en estos días en México en un neoliberalismo del más descarado, a pesar de que su muerte fue decretada por el propio AMLO como una auténtica burla a los mexicanos inteligentes, porque se está negando la salud y los servicios básicos como agua potable luz eléctrica, a los más pobres, situación que además viola flagrantemente los derechos humanos.
Nuevamente los antorchistas hemos salido a la calle para denunciar esta política que no representa los intereses del pueblo y que está dañando profundamente a nuestro país de heridas que van a ser difíciles de sanar.
Seguiremos en pie de lucha en nuestro plantón pacífico en las fueras de la Cámara de Diputados demandando que se lleven obras y servicios a los más pobres y a todo el país, que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) sea repartido en obras para que la vida de los más necesitados sea llevadera y se mejore sustancialmente.
Nuestra presencia aquí es justa y necesaria, por eso exigimos que los millones de mexicanos pobres sean atendidos, porque el presupuesto nacional lo formamos todos con el pago de nuestros impuestos y con nuestro trabajo, y un grupo social no tiene el derecho de adueñarse de él como lo está haciendo AMLO y sus levanta dedos
Exigimos solución, pero como la terquedad y el despotismo imperan en este gobierno autoritario seguramente ésta no llegará, pues entonces de antemano anunciamos que la denuncia nacional estará presente en todos los rincones de nuestro país y más tarde que temprano sabemos que la justicia llegará y ésta tendrán que traerla los propios mexicanos que están siendo agredidos por este gobierno incapaz. Así sea.
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