A más de tres meses que empezaron las obras en el Centro Histórico, Guerrero, Tabacalera, San Cosme Revolución y demás calles y avenidas del Centro y sus alrededores por parte del Gobierno de la CDMX, que de acuerdo a la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, hay un presupuesto de 48 millones de pesos y que es para embellecer toda la zona del proyecto Alameda con el fin de atraer a más turismo, ha sido una pesadilla para los habitantes que viven en esa zona.
Y no solo en la zona Centro, sino también en casi toda la ciudad, cono en las alcaldías Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Azcapotzalco, Iztacalco, Venustiano Carranza, etc., donde sus habitantes están hartos de vivir entre tanta tierra y lodo, ya que cuando hace calor o sopla el viento el polvo causa enfermedades respiratorias y de infección en la garganta, principalmente a niños y personas de la tercera edad que son los más vulnerables.
Pero cuando llueve, se convierte en un caos, ya que el lodo que se forma con la lluvia causa accidentes, resbalones, hundimientos y hasta el riesgo de que una persona caiga en un agujero por los charcos que se forman, esto don dejar de mencionar los daños que causan a los vehículos que circulan por esas zonas, sin que el gobierno de la ciudad se haga responsable de los daños, además que en algunas zonas no hay luz, agua, teléfono y la suciedad que se forma con las tolvaneras que esto provoca.
Y es que desde el inicio de la gestión de Sheinbaum, siguiendo el ejemplo de su sensei López Obrador, despidieron a más de 10 mil personas en diferentes áreas, incluyendo Obras y Servicios, donde la gestión de Sheinbaum prefirió contratar a empresas privadas que se encargarán de los trabajados de pavimentación, colocación de guarniciones, banquetas, concreto hidráulico, siembre y poda de arboles y de mobiliario urbano.
El problema de agravo cuando no hubo un coordinador que los dirigiera y que cada empresa actuara por sí sola, por lo que en vez de empezar por partes, decidieron hacerlo todo al mismo tiempo, por lo que provocaron un caos enorme en toda la ciudad y sus habitantes son los que padecen el infierno que se vive actualmente, sin que alguien hasta ahora del gobierno capitalino de la cara para explicar porque no hubo un coordinador o un supervisión en el ramo de la construcción.
Aunque Sheinbaum y aseguró que todos los trabajos terminarían a más tardar en diciembre, al paso que van los más seguro es que terminen hasta enero por la desorganización en la que trabajan y aunque la jefa de gobierno cuenta con seis años para hacer todos estos trabajos y por partes, tal parece que se le fueron las cabras, porque no hay alguien que controle y dirija a las empresas.
Aunque en algunas partes ya se ven avances muchos de los vecinos están molestos porque además, de que no les avisaron, muchos están molestos porque sufren por estas obras y se preguntan qué porque no lo hizo poco a poco, teniendo en cuenta que tiene todavía le faltan cinco años para realizar todos estos trabajos y lo peor de todo es que ni les avisaron que realizarían dichas obras y para cuando terminarán, porque cada día que pasa es un aliento menos de vida que se les va.
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