Rebeca Marín
En la gastronomía mexicana, el nopal es un ingrediente estrella que se utiliza en una gran variedad de platillos, como ensaladas, sopas, guisos y hasta bebidas. Además, su bajo costo y fácil acceso lo hace una opción popular y accesible para muchos hogares.
Y con el programa de control fitosanitario de plagas del nopal beneficia a 600 productores de la Alcaldía Milpa Alta anualmente, lo que representa una atención a más de 350 hectáreas de este cultivo cada año.
La iniciativa forma parte del programa Altépetl Bienestar, impulsado por la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, como parte de su compromiso con la restauración de los agroecosistemas y el bienestar de las familias y comunidades del suelo de conservación.
La alcaldía Milpa Alta, ubicada al sur del Valle de México, es la segunda más grande en cuanto a territorio, solo superada por Tlalpan, considerada una alcaldía 100% rural. Forma parte del suelo de conservación, la reserva ecológica que permite la vida tal y como la conocemos en la Ciudad de México.
Además, es el segundo productor a nivel nacional de nopal verdura, lo que la convierte en un referente en la producción y comercialización de este cultivo en el país.
El cultivo de esta infaltable verdura ocupa más de 2,230 hectáreas distribuidas en toda la demarcación. Su cultivo, corte y comercialización es una de las actividades más importantes en la generación de empleo, contribuyendo al desarrollo rural de las comunidades y a la seguridad alimentaria de la población.
Por esta razón, la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (CORENADR) puso en marcha desde 2019 un proyecto para el control fitosanitario de plagas que afectan los órganos de esta planta y limitan la absorción de nutrientes, reduciendo notablemente la capacidad de producción y la calidad del nopal.
Entre las plagas más recurrentes se encuentran: mancha negra, cochinilla, picudo barrenador, caracol, chinche roja, chinche gris y mal del oro.
Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA a este enlace
La implementación de este control fitosanitario no solo protege el cultivo de nopal, sino que también tiene beneficios económicos, sociales y ambientales. Al proteger el cultivo, se asegura la producción y, por ende, se generan empleos en la zona, lo que contribuye a la economía local. Además, se mejora la calidad del producto, lo que a su vez aumenta su valor comercial.
Sobre los beneficios sociales, el control fitosanitario protege la salud de la población, ya que evita la utilización de pesticidas tóxicos que pueden afectar a los trabajadores y consumidores. También contribuye a la sostenibilidad de la zona rural, mejorando las condiciones de vida de los agricultores y sus familias.
La verdura nopal es un alimento sumamente nutritivo y versátil en la gastronomía mexicana. Es rico en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes que ayudan a mantener una buena salud digestiva.
0 comments:
Publicar un comentario