Con fecha el 15 de noviembre, el Presidente Andrés Manuel López Obrador envío una sorprendente terna al Senado de la República.
Se trata de tres mujeres con el sello político de Morena para ocupar la vacante del ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar.
El mismo día que la Cámara Alta aprobó la renuncia del ministro, el mandatario envió la terna a las 16:30 horas.
Nadie en su sano juicio cuestiona que sea una terna de género, lo que se objeta es el perfil meramente activista.
La primera, Bertha María Alcalde Luján, es hermana de la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Lujan.
Ambas son hijas del matrimonio Alcalde-Luján. Arturo Alcalde es un reconocido abogado sindicalista, amigo del Presidente, y la madre, Bertha, incondicional de toda la vida del político de Tabasco.
Lenia Batres Guadarrama, es hermana del jefe de gobierno, Martí Batres Guadarrama.
Ambas tienen como hermana mayor a Valentina, actual diputada en el Congreso de la Ciudad de México.
Se trata de una familia que se catapultó a la vida pública de la mano del PRD, partido que les dio la oportunidad del ascenso. Hoy son totalmente morenistas.
Alcalde y Batres, forman parte del ADN guinda. Pueden ser catalogadas en el rubro de los "puros"; una casta que ha vivido del erario los últimos años.
¿Puede calificarse de nepotismo? Tal vez no lo sea. Pero tiene toda la esencia de ofensa a los integrantes de un Poder Judicial preparados para defender y hacer valer la ley.
Es evidente que cada designación del Presidente en el tribunal, es un riesgo de pretender colonizarlo con su amañaba transformación.
Dicha terna es una burla para la justicia federal. Al Ejecutivo le importa poco o nada el daño que ocasiona.
Y en esa torcida propuesta, con seguridad ha influido enormemente Zaldívar Lelo de Larrea, hoy del equipo de Claudia Sheinbaum.
Pero el hecho con seguridad no sorprende al Poder Judicial. Ese maltrato y más han recibido del Presidente, que no pierde oportunidad para atacarlo y denostarlo.
María Estela Ríos González, actual Consejera Jurídica de la Presidencia pudiera ser la carta ideal para el cargo.
Ríos González, fue titular de la Consejería Jurídica de López Obrador como jefe de gobierno.
Esos dos cargos son lo más cercano a la vacante a ocupar. Una carrera judicial que dista bastante comparada con perfiles sólidos y de trayectoria.
¿El Senado aprobará alguna de las tres mencionadas? Se torna complicado, dada la coyuntura político electoral.
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