Martín Aguilar
Un juez de control determinó la prescripción de los delitos de fraude genérico y continuado en contra del empresario argentino, Carlos Ahumada Kurtz, así como de la sentencia pecuniaria, por lo que regresará a su país natal y no deberá cumplir con el resto de la pena de un año, 10 meses y 23 días de prisión.
En audiencia en la sala oral 21 del Reclusorio Norte, el juez señaló que las autoridades capitalinas fueron omisas para solicitar el pago de los 26 millones de pesos como reparación del daño, por lo que esta también prescribió, y no tendrá que pagarlo al Gobierno de la Ciudad de México.
Y es que refirió que no hicieron los trámites legales desde 2009 para solicitar dicho pago, por lo que con la prescripción, no podían solicitarlos.
Durante el debate de poco más de tres horas, la defensa de Ahumada Kurtz encabezada por su hijo y el abogado Enrique Ostos, presentaron los alegatos para argumentar la procedencia de la prescripción de la sanción impuesta en sentencia de 2009, cuando se le condenó a 5 años de prisión y el pago de 26 millones.
Enrique Ostos explicó que la determinación del juez incluye la prescripción de un año y 10 meses de prisión, así como el pago de la reparación del daño.
Carlos Ahumada agradeció al juez por la resolución en estricto apego a derecho.
"Le agradezco que usted haya resuelto en estricto apego a derecho", dijo Ahumada al finalizar la audiencia.
Como se recordará, Carlos Ahumada Kurtz es un empresario argentino naturalizado mexicano. Se ha desarrollado en sectores como los medios de comunicación, la construcción, la minería e incluso, el fútbol.
En el rubro de los medios de comunicación, creó el periódico El Independiente, el cual fue liderado por el periodista Javier Solórzano. Además, compró equipos de fútbol como los Panzas Verdes de León, Guanajuato, y los Laguneros de Santos, Torreón.
En el año 2004, el empresario argentino se vio envuelto en un proceso legal causado por la difusión de videos en donde entregaba dinero a distintos políticos, caso al que se conoció como los "videoescándalos". Esto le ocasionó cargos por fraude por 30 millones de pesos en contra del gobierno capitalino por obras en alcaldías como Gustavo A. Madero y Tláhuac.
Después de esto, Carlos huyó a La Habana, Cuba, aunque fue deportado a México donde fue encarcelado durante dos años. Fue liberado el 8 de mayo de 2007.
Tras su liberación, regresó a su natal argentina en donde dirigió diversos equipos de fútbol, sin embargo, fue detenido en 2019 por la Interpol en Buenos Aires acusado por la Fiscalía General de la República por el delito de evasión de impuestos contra la hacienda pública mexicana. Fue extraditado a México en julio de 2024 y este 27 de agosto, los cargos en su contra fueron desestimados y fue puesto en libertad.
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