Rebeca Marín
Las personas sordas tienen derecho a entornos que favorezcan su autonomía, seguridad y plena participación, y esto implica, entre otras cosas, incluir sistemas de señalización visual clara y diseños espaciales que faciliten la comunicación y el acceso a la información.
En el marco del Día Internacional de las Lenguas de Señas, a celebrarse este 23 de septiembre, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred), informó a toda la sociedad la importancia de la accesibilidad de personas sordas en espacios abiertos y cerrados.
El organismo puntualizó que este día surge con el objetivo de concienciar sobre la importancia de las lenguas de señas para la plena realización de los derechos humanos de las personas sordas.
Elogió la implementación de alertas sísmicas accesibles para las personas sordas las cuales contemplan medios visuales, de vibración u otras tecnologías adaptadas para brindar una alerta temprana que garantice su seguridad.
Igualmente, se celebra la rica diversidad cultural que las lenguas de señas aportan al mundo, y se resalta la urgencia de garantizar que todos los espacios, servicios y tecnologías sean accesibles para la comunidad sorda.
Uno de los aspectos cruciales es el diseño universal en la comunicación, que implica crear sistemas que consideren las necesidades de todas las personas, independientemente de sus capacidades auditivas.
Estos mecanismos deben ser parte fundamental de un diseño inclusivo que permita a todas las personas recibir la información de forma oportuna y adecuada.
El compromiso con un diseño inclusivo en la construcción también debe considerar la accesibilidad comunicacional en servicios y edificios, donde la información sobre evacuaciones, rutas de acceso, y servicios generales esté disponible en formatos visuales y comprensibles para quienes no pueden escuchar. Esto no solo beneficia a las personas sordas, sino que contribuye a la creación de un entorno seguro, equitativo y funcional para toda la sociedad.
Instamos a las instituciones y a la industria de la construcción a adoptar normas universales que garanticen la accesibilidad para las personas sordas.
Esto incluye la incorporación de tecnologías visuales en sistemas de emergencia, como alarmas contra incendios o evacuación, la utilización de pantallas visuales en ascensores y áreas comunes, y la implementación de espacios diseñados para facilitar el uso de la lengua de señas en áreas públicas y privadas.
La lengua de señas es uno de los principales medios de comunicación de las personas sordas, la inclusión plena requiere también de una transformación en el diseño de nuestra sociedad, donde la accesibilidad no sea la excepción, sino la norma.
"Reafirmamos nuestro compromiso con la inclusión y reiteramos la urgencia de transformar nuestros entornos a través del diseño universal, para que nadie quede excluido de participar plenamente en la sociedad".
Copred remarcó que las lenguas de señas son una herramienta clave para la comunicación, pero también es esencial construir espacios que respondan a las diversas necesidades de todas las personas.
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